- Aún jugábamos
dulces señoras
la doble
puerta de doble dintel en que la tarde de Roma
dicte las
circunstancias de vuestra propia maldad?
Oh, Hermanos,
contadme algo!
Celebráis
la muerte de los héroes,
Vuestros guerreros,
Los antiguos
cantos se han cumplido,
Mas uno a
uno todos fueron masacrados a lo largo de algo:
[-La doble
función ritual:]
- Liberar tribus
enteras de esparceras, sometiendo ahora sus
hijos a nuestros hijos. Al ser la otra mitad de nosotros, -
Nadie-
No podrán venir ellos a gobernaros
mas sí fuego que avive la llama en
que nuestros nietos os sofoquen
y vengan a sonreír detrás del viento.
-Canta
ahí nuestros nombres.
-Seremos
por siempre tu dulce señuelo, Hora amarilla, señor
de la brisa de estiaje.