Sin grandes temas y con la aniquilación de la fantasía,
Somos el desencantamiento, la ciudad, la banalidad de nuestros secretos.
¿Somos poetas o simplemente confeccionamos versitos?
Rostros de otras eras y su desilusión:
El ser humano es la mentira de sí mismo:
Guerra y retrato,
del juego del dado jugado por proxenetas y vampiros.
¡Ah! Los héroes de la década,
canto sagrado que oculta quién fue violador
y quién sacerdote-pederasta,
quién mató a su propio hermano
y nadie supo los nombres de la otra mitad
de los padres de la edad moderna.
Al principio mató al hermano, luego fue sacrificado el hijo, màs tarde se mata al padre, por ùltimo para ser màs fuertes se mata a dios. Creo que mucho màs que versitos o ver-sìculos. el romanticismo empieza a buscar en la muerte, todos los misterios.
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